Terapia láser para aliviar el dolor

Beneficios del láser terapéutico de clase IV: Terapia láser Summus:

Mejora de la curación de los tejidos: los tratamientos con láser mejoran la circulación sanguínea y el drenaje linfático, liberan oxígeno y nutrientes del torrente sanguíneo a los tejidos y mejoran la actividad metabólica celular para producir más energía celular. Con más energía disponible, las células dañadas pueden repararse y regenerarse más rápidamente y con mejor calidad.

Aceleración de la reparación de tejidos y del crecimiento celular: los fotones de luz láser penetran profundamente en los tejidos y aceleran la reproducción y el crecimiento celular. La luz láser aumenta la energía disponible para la célula, de modo que esta pueda absorber los nutrientes más rápidamente y deshacerse de los productos de desecho. Como resultado, las células de los tendones, ligamentos, huesos, nervios y músculos se reparan más rápidamente.

Cicatrización más rápida de las heridas: la terapia con láser estimula el desarrollo de fibroblastos (los fibroblastos son los componentes básicos del colágeno, que predomina en la cicatrización de las heridas) en el tejido dañado. El colágeno es la proteína esencial necesaria para reemplazar el tejido viejo o reparar las lesiones tisulares. Como resultado, la terapia con láser es eficaz en heridas abiertas, cicatrices y quemaduras.

Reducción de la formación de tejido cicatricial fibroso: la terapia con láser reduce la formación de tejido cicatricial después de un daño causado por cortes, rasguños, quemaduras o cirugías al inducir la producción de más colágeno tipo 1 normal. El tejido cicatricial es la principal fuente de dolor crónico. Los tratamientos con láser deben administrarse lo antes posible después de cualquier lesión aguda para promover la producción de colágeno tipo 1 y la alineación paralela de las fibras de colágeno.

Modulación de la inflamación: los tratamientos con láser modulan la inflamación al provocar vasodilatación y activar el sistema de drenaje linfático. Como resultado, se produce una reducción de la hinchazón causada por hematomas o inflamación. No intente decir que los tratamientos con láser son "antiinflamatorios", ya que no suprimen la inflamación como lo hacen los medicamentos antiinflamatorios no esteroides (AINE). En cambio, los tratamientos con terapia láser de clase IV ayudan al cuerpo a superar las etapas de la inflamación de manera más eficiente.

Analgesia: La terapia con láser puede reducir la activación de las fibras C-dolor que transmiten señales de "dolor" desde las células hasta el cerebro. El aumento de la circulación sanguínea elimina los irritantes tisulares llamados "quininas". Las sustancias químicas que modulan el dolor, como las endorfinas y las encefalinas, se liberan desde el cerebro y la glándula suprarrenal. El aumento de la permeabilidad de la membrana celular fomenta concentraciones normales de iones a través de la membrana celular y el potencial de reposo de las fibras del dolor vuelve a -70 milivoltios.

Actividad vascular mejorada: la terapia con láser aumentará significativamente la formación de nuevos capilares en el tejido dañado, lo que acelera el proceso de curación, cierra las heridas rápidamente y reduce el tejido cicatricial. Los beneficios adicionales incluyen la aceleración de la angiogénesis, que provoca vasodilatación temporal, un aumento del diámetro de los vasos sanguíneos. Un mayor flujo sanguíneo equivale a una curación más rápida y menos dolor.

Mejora de la función nerviosa: la recuperación lenta de las funciones nerviosas en el tejido dañado puede provocar entumecimiento y deterioro de las extremidades. La terapia láser acelerará el proceso de reconexión de las células nerviosas y aumentará la amplitud de los potenciales de acción para optimizar la acción muscular.

Regulación del sistema inmunológico: la terapia láser puede aumentar la respuesta del sistema inmunológico local y tener un efecto positivo en la respuesta inmunológica de todo el cuerpo. El aumento de la circulación y la producción de energía celular mejorarán la actividad de las células del sistema inmunológico, lo que ayudará a reducir y combatir las infecciones.

Puntos gatillo y puntos de acupresión: La terapia con láser reduce los puntos gatillo musculares y estimula los puntos de acupuntura de forma no invasiva, proporcionando alivio del dolor musculoesquelético.